marzo 02, 2012

Entrando por lo ojos

No hay nada como un "frontstore" bonito y atractivo para invitarte a entrar y comprar.


Cuando una tienda tiene un fachada con encanto es muy difícil resistirse.... y al final no acabar "picando".








1 comentario:

  1. No puedo estar más de acuerdo. Es como un imán que irradia una fuerza de atracción que no puedes controlar. Ese detalle tan tonto de la bici antigua en la puerta, la madera antigua, el marco colgado de la pared...
    Vamos que entro de cabeza y a buen seguro me llevo algún artículo que, por supuesto, ni buscaba, ni necesito. Eso sí, el momento de placer no me lo quita nadie.

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